Fiebre por los 80
¡Hola! Que gusto saludarles una vez más. El año se me está yendo como agua y cuando menos lo esperé... ¡Ya es JULIO! ¿Lo pueden creer?. Me gustaría que me contaran respecto a su año ¿Cómo va hasta ahora? ¿Es lo que esperaban? ¿O sienten que aún están calentando motores? Yo, sinceramente, he sentido que estoy viviendo en una especie de piloto automático muy Sandleresco (sí, luego les explico). Pero eso también me llevó a escribir este blog de hoy.
Al principio no sabía de qué tema hablar. Vi mis notas guardadas, consulté ideas pasadas, y nada me emocionaba. Mucho menos los temas tipo: “Cinco looks para el verano” o “Colores de acuerdo a tu tono de piel”. Porque si algo ha definido mi estilo este año… ha sido el de Adam Sandler.
Pantalones y camisetas gigantes, cara de que acabo de despertar y toda la actitud de “a mí no me molesten”. Y aunque quizás luego sí escriba sobre looks y sugerencias, hoy prefiero contarles una historia. Porque también la moda es eso: una forma de narrarnos.
Y últimamente, muchas de nosotras hemos andado con una canción ochentera en la mente, un delineador de colores en el cajón, y una especie de anhelo inexplicable por el brillo.
El mes pasado, se estrenó en Amazon Prime la adaptación a serie del musical mexicano "Mentiras" En donde las canciones en español de los 80 y el estilo de toda la década es su principal atractivo.
No les hablaré de la historia (por ahora) pero sí me inspiró profundamente a escribir sobre esa década. Porque si algo nos enseñaron nuestras mamás, tías y vecinas, es que los ochenta no se vivían, se actuaban. Todo era exagerado, ruidoso, brillante, poderoso. Era la década donde lo que importaba no era si algo te quedaba bien, sino si llamaba la atención.
Y en eso, la moda era protagonista.
Los ochentas estaban llenos de volumen, de color y brillo. Pero ¿Por qué?
¿Por qué brillaban tanto?
Las décadas anteriores (los 60 y 70) fueron décadas de rebeldía, de revolución, de alzarse contra el sistema. Décadas marcadas por crisis económicas y políticas, de jóvenes cansados de las desigualdades, de las guerras y de un sistema violento. Los ochentas llegaron entonces como un grito de: ¡Basta! ¡Quiero brillar!
Bueno, tampoco todo tenía que ser bueno... Fueron los ochentas donde el consumismo se estableció como el problema que sigue siendo actualmente y la idea de que tener dinero es equivalente a tener éxito. permeó tanto que en la actualidad seguimos con esa mentalidad.
MTV, LA MODA Y LOS VIDEOCLIPS COMO PASARELA
Fue a partir de 1981 donde se cambió radicalmente la forma de consumir moda, ya que en ese año MTV salió a la luz como un canal con lo más reciente en música y tendencias. Por primera vez, la música no sólo se escuchaba sino que también se veía, permitiendo a artistas como Madonna, Michael Jackson, David Bowie, Cyndi Lauper, Prince, etc... mostrarse con prendas llamativas, coloridas, estrafalarias y estableciéndose así como íconos de moda.
El videoclip se convirtió en una pasarela global y la moda explotó en cada pantalla.
¿Y en México?
Aunque MTV llegó a América Latina hasta los 90, acá ya teníamos nuestros propios íconos. Desde los 60, de hecho, programas como Siempre en Domingo nos mostraban a Lucía Méndez, Yuri, Lupita D'Alessio, Flans, Gloria Trevi, Daniela Romo, cada una con un estilo propio, inolvidable, copiado en todas las fiestas escolares.
Ellas no se vestían, se transformaban. Usaban pelucas, flecos, guantes, mayones con lentejuelas. Su ropa era identidad, performance, poder femenino. Y gracias a artistas como Flans, por cierto, Latinoamérica apareció por primera vez en MTV.
Nuevos materiales = Nuevas Siluetas
Hoy, generaciones como la nuestra, cruzadas por la ansiedad climática, las crisis laborales, los algoritmos y las guerras, estamos volteando al pasado.
Adoptamos lo mejor de décadas como los 80 porque necesitamos brillar en medio del desastre. Nos maquillamos con colores intensos, usamos crop tops, botas, glitter, delineadores. Amamos pilates y también las hombreras. Nos reímos del clean look mientras buscamos nuestra versión más genuina.
Porque cuando el presente asfixia, el pasado nos recuerda que aún podemos ser estridentes.
Entonces... ¿Te ves?
De nuevo... ¿En qué piensas cuando piensas en los 80?
¿En los estampados animales, las luces neón, las chamarras con hombreras gigantes, los radios con doble casetera?
¿O en tu mamá bailando sus canciones de Menudo en la sala? ¿Tu tía con su maquillaje azul eléctrico? ¿Tu vecina con mallas plateadas?
La moda, como la música, vive en la memoria. Y los 80 nos siguen gritando algo importante: no importa si algo es demasiado. Lo importante es si te hace sentir vivo.
Así que sí, sigamos brillando. Sigamos usando lo que amamos, aunque parezca “mucho”. Que nadie te quite el delineado neón ni la playlist de señora. Porque si el mundo está cayéndose a pedazos, por lo menos que nos vea bien vestidos.
¿Me ves?
Mis papás dicen que la mejor epoca de la humanidad y la música fueron los 80's
ResponderEliminarQue vuelvan y que nos hagan vivirlos, pero que se vaya la moda de la ropa oversize😭😭